Let’s not go and ruin it by thinking too much.

Clint Eastwood

Estas pasadas Navidades algunos hemos estado encerrados… los más afortunados, además de ponernos al día en películas, hemos leído y dedicado tiempo a pensar…

Lees artículos (prensa, académicos, revistas), o ves decisiones de gobiernos (leyes, ayudas), y parece que sólo existen negocios “digitales”; los “tradicionales” (activos industriales, empleados muy diversa cualificación) contaminan, no están de moda, ni ocupan páginas…

Es cierto que la innovación se hace más visible en empresas “digitales”. Pero también lo es que los negocios con fábricas, productos y cadenas de suministro resultan en general menos imitables… pese a sus retos (presión de márgenes por aumento de costes de electricidad y materiales, tensiones en las cadenas de aprovisionamiento, etc…).

Reducir la imitabilidad de algunos negocios exige no sólo innovar, lanzar productos, generar economías de red… a veces también pasa por invertir en lo tradicional, en activos físicos.

Desde Piedmont estamos ayudando a algunos de nuestros clientes a mejorar el funcionamiento de su cadena de aprovisionamiento… y también a dotar de activos físicos a negocios digitales exitosos.